Aunque no existe un método infalible para calmar el llanto del bebé, aquí te damos una serie de trucos y consejos que pueden ayudarte. Eso sí, no te olvides en primer lugar de comprobar que sus necesidades básicas están cubiertas, y que el bebé llora no por hambre, sed o porque necesita que le cambies el pañal.
- Sigue un ritmo regular. Los movimientos o sonidos rítmicos pueden aliviar el llanto del bebé. Por ejemplo: acúnale o balancáele en su cunita, paséalo en brazos o en carrito, acércalo a sonidos rítmicos y constantes (música suave, el sonido de la lavadora...
- Hazle un masaje.
- Báñalo. Nadie puede negar las propiedades relajantes de un buen baño en agua templada. Aprovecha el aseo diaro para calmar a tu bebé.
- Abrázalo. Un buen abrazo puede calmar su llanto. También puedes probar a abrazarlo a un peluche o una manta suave.
- Los bebés recién nacidos buscan la protección a su alrededor, como cuando estaban en el útero materno. Puedes intentar calmar su llanto envolviéndole en una sabanita o una manta , siempre teniendo cuidado de dejarles respirar correctamente.
- Dale el chupete. La succión del pulgar o del chupete es un método muy bueno para calmar el llanto del bebé. Recuerda que no se debe utilizar el chupete en las primeras semanas de vida para no interferir con la lactancia materna.
- Entretenlo. Si tu hijo está revoltoso, prueba a distraer su atención. Colocale delante del espejo para que se vea reflejado en él. Muéstrale algún juguete o algún objeto de la casa.
